Redacción/La humorista gaditana Paz Padilla, representará el próximo viernes, 12 y sábado, 13 de mayo, en el Centro Cultural Asabanos de Valverde, el espectáculo teatral “El humor de mi vida”, dentro de la gira canaria de este espectáculo que también representará el 14 de mayo en Tenerife, 19 y 20 de mayo en La Palma y el 21 de mayo, en La Gomera.
La andaluza ofrecerá dos funciones los días 12 y 13 de mayo, a las 20:00 horas, en el Centro Cultural Asabanos de la capital herreña.
Según ha informado la organización del evento, la gira por las islas de Paz Padilla ha sido un rotundo éxito. “El canario es muy generoso y acoge al forastero siempre con los brazos abierto. Siempre he sido muy feliz en Canarias y por eso he querido que “El humor de mi vida” recorriera todas las islas. Esperaremos a que en La Graciosa haya un auditorio para volver en otra ocasión”, señala Padilla en un comunicado.
El público ha agotado las localidades en cada uno de los espacios culturales y teatros en los que se ha presentado “El humor de mi vida”, que cuenta con la dirección de Pablo Barrera y ha sido disfrutado en su ya segunda temporada por más de cien mil espectadores de toda España. El espectáculo, del que se han llevado a cabo más de 130 representaciones, entrará el próximo otoño en su tercera temporada, regresando a la cartelera de Madrid. El divertido espectáculo cuenta también sobre el escenario con la participación del productor y compositor Juan Fernández de Valderrama (miembro del grupo Materia Prima, a quien conoce desde hace muchos años), que acompaña a Padilla con algunas melodías y canciones en acústico durante una función.
El montaje teatral está inspirado en el libro escrito por la propia Paz Padilla en 2021 y editado por Harper Collins, en el que narra su experiencia vital acompañando a su marido, Antonio Vidal, en el proceso de su enfermedad y su despedida. Durante el transcurso de la función formula una tonificante y sanadora reflexión alrededor de la muerte y la vida, a modo de intenso viaje entre el amor y la muerte, pero lleno de humor, de mucho humor, porque la vida está llena de ambas cosas.
“En la obra digo que si le tenemos miedo a la muerte moriremos todos los días, pero si le perdemos el miedo moriremos solo una vez”, apunta Padilla.
“Esta obra, que es una montaña rusa de emociones, es muy reflexiva y por eso el público cuando sale de la función sale pensando qué hacer con su vida” expresa.
“La sensación con la que sale la gente es con unas ganas de vivir locas, de amar y de decirle a su familia “te quiero, gracias”, es muy gratificante ver al público, reír y llorar de emoción y salir feliz del teatro”, asegura Padilla.